domingo, agosto 20, 2006

Hervé Fischer de visita en Valdivia

El martes llegó Hervé Ficher desde Santiago, donde realiza una muestra en el Museo de Bellas Artes, feliz de encontrarse con un precioso día de sol. En Santiago había pasado 10 días de lluvia. Lo recibimos en mi casa, con un buen vino chileno (movidas del Fischer valdiviano!), el cariño de la cocina sureña y la feliz concidencia de encontrarse con un mosquero local. Esa noche conversamos de color, y es que Hervé ha estudiando vastamente la relación entre sociedad y color. Me decía que el color ha pasado por épocas y sociedades. Por ejemplo la clase alta en la Edad Media era muy colorida, pero a partir del puritanismo de Lutero esto cambia y aparece la vestimenta blanco y negro como símbolo de recato y sobriedad. Eso permanece hasta hoy. Sin embargo en el romanticismo aparecen nuevamente algunos colores. Y hoy, con los nuevos medios de comunicación, los colores cambian continuamente. Antiguamente, los colores eran usados como íconos, asignándole a cada uno un significado. En su biografía promete publicar pronto un libro sobre este tema. Al día siguiente ofreció una charla en la universidad, donde presentó su obra y luego respondió preguntas. El público era principalmente estudiantes de arquitectura, de periodismo y de antropología. Algunos profesores. Y un par de artistas locales. Hervé explicó el uso de colores en sus pinturas: son la parte humana o lúdica de sus códigos de barra o sus códigos de ADN (ya que en estos códigos normalmente no tiene sentido el color), son la parte de creación y de libertad que lo hacen humano.

sábado, agosto 12, 2006


La tarea final del curso de color de la carrera de artes visuales, se trató de que a partir de una foto original en colores, tenían que lograr reproducir froma y color del modo más fiel posible. Observar y ver colores. Algunos estudiantes, donde había 5 colores, ven sólo 1. Otros, ven gamas completas. Después de reproducir el pequeño original a un tamaño de 50x70 cm, había que traducirlo a B/N y grises. Otra tarea apoteósica. Aquí hubo varios que quedaron en el trayecto. Porque ver la cantidad de luz u oscuridad que tiene un color no es fácil. En estas fotos estamos durante la primera entrega. Asombrados de constatar que el vecino pinta el mismo rojo de la foto casi como un rosado y que yo, lo veo (y pinto) tirado al naranja.¿Cómo puede ser esto?¿Había distinta luz cuando pintamos?¿usamos diferentes pinturas?¿vemos distinto?